Septiembre de 2007, nº 23

Aprender cantando

A Harlan G. Palmer III sus padres le llamaban Hap. Y así es como le llama todo el mundo. En Estados Unidos, es un pionero en el uso de la música en la educación.

Empezó a utilizarla en los años 60, cuando se dedicaba a la educación especial. «Cuando empecé a hacer actividades musicales con los niños, tocaba la guitarra y trataba de hacerles cantar canciones de la época. Ellos querían saltar, moverse y correr y yo trataba de que se sentaran y prestaran atención», recuerda Hap. «Así que me pregunté porqué no trato de trabajar con el deseo natural de los niños de estar activos y participando activamente... Y comencé a combinar música y movimiento y a escribir canciones que invitan a los niños a levantarse de sus asientos y a experimentar el mundo a través de una participación activa».

El disco "HAP PALMER: Learning Basic Skills Through Music - Volume 1" es un clásico. Fue el primero que grabó, en 1969. Números, colores, el alfabeto, y algunas otras cosas son las que se cantan en este álbum, para preescolar, para niños que empiezan Primaria y para aquellos que aprenden un poco más despacio. También es muy utilizado para enseñar inglés a los más pequeños.

Después de este, Hap sacó muchos otros CD, incluyendo uno en el que canta en español: Divirtámonos aprendiendo con Hap Palmer.

Cuando Hap tenía nueve años, le dijo a su madre que quería tocar percusión. Su madre le dijo que eso era muy ruidoso y le compró un clarinete. Eran los años 50, cuando el rock'n'roll se estaba haciendo muy popular. Al cabo de unos años Hap se compró un saxo.

Su padre tenía una colección de discos de Swing y solía tocar en los bailes de su instituto. Era una especie de DJ, antes de que el término existiera. Hap, de niño, recuerda tumbarse en la cama y escuchar todas esas grabaciones.

En los años 60, Hap tocaba en la banda del colegio. Por esa época, su hermana Peg se fue a una escuela de verano en México y volvió con una guitarra. Hap se entusiasmó con ese instrumento. Podía cantar y tocar al mismo tiempo, y empezó a tocar canciones folk. Hap se movía entonces entre el folk y el jazz. Después de graduarse, se dedicó a la educación especial, y trabajaba a tiempo parcial como músico. Escribió canciones para los adultos, que casi siempre trataban de relaciones. Y un día descubrió que los niños ofrecían posibilidades inagotables. Y Hap se dedicó a escribir para ellos.