Un estudio
realizado con 100.000 alumnos de 31 países concluye que los ordenadores
vuelven tontos a los niños. Impedir el uso de los PCs en clase y en
casa mejoró su rendimiento en el colegio. Los autores, Thomas Fuchs y Ludger Woessmann, del Instituto de Investigación Económica de la Universidad de Munich, Alemania, utilizaron los test PISA
para medir este rendimiento en 100.000 niños de 15 años. Los que tenían
acceso a 500 libros en casa se desenvolvían mejor que los que tenían
ordenador.

Los alumnos están perdiendo la capacidad para analizar y resolver
problemas, y, según los expertos, sería mucho mejor potenciar la
creatividad, es decir, apagar los ordenadores y estimular la
imaginación de los niños.

El valor de la creatividad, la imaginación y el pensamiento crítico sobre el acceso a la información parece evidente, dice The Register,
pero existe una especie de matrimonio de conveniencia entre los
vendedores de tecnología —que quieren atiborrar de ordenadores las
aulas, aunque nadie los pida— y los gobiernos perezosos, para los
cuales la tecnología es una forma de dar la imagen de modernos y recortar los presupuestos de educación.

La Alliance For Childhood, de Estados Unidos, escribió el pasado septiembre un informe crítico titulado Ilusión Educativa: Una crítica del uso del ordenador en la infancia, que está disponible en español.

Muchos adultos deberían seguir también estas recomendaciones, dice The Register.
«Durante años, los que abogan por la tecnología han hecho la fácil
ecuación de información igual a poder, pero estamos descubriendo que la
información por sí misma no es nada».