Los hermanos mayores reciben mejor educación y obtienen mejores salidas laborales que los menores. Es el resultado de un estudio que se publicará en el número de mayo del Quarterly Journal of Economics,
una publicación de Harvard. No importa el tamaño de la familia, pero sí
el orden. El estudio se basó en los datos censales de los noruegos
nacidos entre
1912 y 1975.

Lo más curioso es que los hijos mayores
aprenden mucho de los pequeños, al ocuparse de ellos y enseñarles, y no
al revés. Otro dato es que los hijos que crecen solos con dos adultos
tienen más estímulo intelectual que los que crecen con varios hermanos
y reciben menos atención de los padres.

—Entonces, ¿quiere eso decir que los hermanos mayores son más listos?, le preguntaron al profesor Kjell Salvanes de la Escuela Noruega de Economía y Administración de Empresas, uno de los coautores del trabajo.

—Sí. Es duro admitirlo, porque yo tengo hermanas mayores.

The More the Merrier? The Effect of Family Composition on Children’s Education.