Cuando Jack se retira a la costa con su esposa Rose, piensa que el
final está cerca. Pero pronto descubre que la vida no es un ticket sólo
de ida. Después de un mortal ataque al corazón, Jack vuelve a la Tierra
reencarnado en un perro y, sin darse cuenta, es adoptado por Rose. Así
comiensa un extraño viaje de Jack en el que empieza a conocerse mejor a
sí mismo y finalmente aprende en qué consiste un buen matrimonio. De
eso va Gone to the Dogs. Lo mejor del web de la película es el juego. Es fantástico. Sólo tienes que responder unas sencillas
preguntas y descubrirás qué perro eres tú, o, mejor dicho, cuál se parece más a ti. Yo “soy” un Musterlander pequeño:

La película recuerda a otra titulada Fluke,
en la que un hombre muere y se reencarna en un perro que no para hasta
volver a casa. Una vez allí, aprenderá muchas cosas de su hijo, de su
mujer y de su propia vida que con el cuerpo de un humano fue incapaz de comprender.